Afirma que luchará por la custodia de sus hijos.
El cantante urbano José Cosculluela fue sentenciado este viernes a tres años de probatoria por el caso de violencia doméstica contra su exesposa, Jennifer Fungenzi.
El pasado 21 de marzo, el cantante de reguetón se declaró culpable tras llegar a un acuerdo con la fiscalía.
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A su salida de la sala, el reguetonero dijo sentirse "victorioso" tras conocer su sentencia.
"Todo bien, salimos en victoria. Todo por estar con mis hijos. Yo entiendo que estamos en victoria. Este proceso cansa. Fue un proceso largo, un proceso que cansa a cualquiera pero vamos pa' encima", expresó.
Por otra parte, el ministerio público solicitó que la orden de protección a favor de Fungenzi se extendiera a tres años, lo que el cantante calificó como una "loquera". Para atender este asunto, se fijó una vista para el 15 de agosto.
Los 11 cargos radicados al artista por Ley 54 fueron reclasificados a tentativa de violencia doméstica del artículo 3.1. Asimismo, los dos cargos por ley de armas fueron archivados.
Cosculluela fue acusado inicialmente de 13 cargos bajo la Ley 54 de 1989, conocida como la Ley para la Prevención e Intervención con la Violencia Doméstica, y dos cargos por violaciones a la Ley de Armas de Puerto Rico. Fue arrestado el 14 de octubre y está libre bajo fianza de $240,000.
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En vistas pasadas, la presunta víctima relató varios incidentes violentos en los que fue golpeada y según su testimonio, el artista la agarró por el cuello e intentó poner su cabeza en el inodoro.
Además, que irrumpió en su casa y disparó, por lo que se encerró con sus hijos. Luego la llamó por "Facetime" y le enseñó a su perrita mientras le ponía un arma en la cabeza, exigiéndole que fuera al primer piso a hablar con él.
Ese día, cuando el fiscal le interrogó sobre el maltrato emocional, esta detalló que el cantante se llegó a referir a ella como "prostituta, asquerosa, mala mujer, puerca, sucia" y que la denigraba al decir que su expareja era mucho mejor que ella.
Asimismo, indicó que el cantante era “sumamente celoso” y que incluso le rompía y quemaba la ropa para que esta no la pudiera usar.
Según se informó, los alegados hechos habrían ocurrido previo a una solicitud de orden de protección solicitada por su expareja, Jenniffer Fungenzi.
