COREA DEL SUR - Casi dos centenares de personas murieron cuando un avión se estrelló el domingo al aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Muan, en Corea del Sur.
La Agencia Nacional de Bomberos confirmó la muerte de las 179 personas, entre ellas todos los pasajeros y la tripulación del vuelo de Jeju Air.
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Dos personas, ambas miembros de la tripulación, sobrevivieron al accidente:
Una de las dos supervivientes del accidente aéreo, una azafata de 33 años de apellido Lee, fue rescatada de la cola del avión y trasladada al Hospital Universitario Femenino Ewha de Seúl.
"Cuando me desperté, ya me habían rescatado", dijo Lee a los médicos, según informó el director del hospital, Ju Woong, según la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
Ju, que habló en una rueda de prensa, dijo que la paciente llegó con múltiples fracturas en las costillas y lesiones traumáticas en la columna vertebral.
Lee estaba siendo tratada en cuidados intensivos y podía comunicarse. "Todavía no hay indicios de pérdida de memoria o algo así", dijo, añadiendo que Lee estaba bajo cuidados especiales debido a las posibles secuelas, incluida la parálisis.
La otra superviviente, una mujer de 25 años de apellido Koo, fue trasladada al Centro Médico Asan de Seúl.
Según se informa, sufrió lesiones en el tobillo y la cabeza y se encontraba en condición estable.
Se han determinado las identidades de al menos 65 de las 179 personas confirmadas muertas, dijo la agencia nacional de bomberos de Corea del Sur.
El accidente de Jeju Air afectó a un avión Boeing 737-800, un avión de pasajeros de fuselaje estrecho que utilizan ampliamente las aerolíneas de todo el mundo, incluidas las de bajo coste como Jeju Air.
El avión formaba parte de la familia Next-Generation de Boeing y es uno de los aviones más seguros de la compañía. Según las estadísticas de la compañía, la línea Next-Gen 737, que incluye los modelos 600, 700 y 900, se vio involucrada en un total de 10 pérdidas de casco fatales entre 1997 y 2023, lo que supone una tasa de 0.08 incidentes por cada millón de vuelos.
Esta cifra es inferior a la tasa general de pérdidas de casco fatales de todos los aviones desde 1959, que es de 0,55, aunque la mayor parte de esta cifra está sesgada por accidentes ocurridos hace décadas con aviones que ahora están fuera de servicio.
Se produce una pérdida de casco cuando el avión sufre daños o queda destruido sin posibilidad de reparación.
El historial de seguridad del Boeing 737 es comparable al de su competencia, el A320 de Airbus.
El gobierno surcoreano ha declarado un período de luto nacional hasta el 4 de enero, según informó el presidente interino Choi Sang-mok durante una reunión en Seúl.
También se instalarán altares conmemorativos conjuntos en el lugar del accidente, anunció, así como en Jeollanam-do, Gwangju, Seúl, Sejong y otras 17 ciudades y provincias.
LA CAUSA DEL ACCIDENTE AÉREO
Aunque las autoridades dicen que es demasiado pronto para determinar la causa exacta del accidente, hasta ahora se cree que un impacto de aves desencadenó la cadena mortal de eventos. Los impactos de aves no son poco comunes en la aviación y en la mayoría de los casos no provocan un accidente fatal.
Los pilotos comenzaron a aterrizar en la pista 1, pero luego se les indicó que aterrizaran en el lado opuesto, la pista 19, después de una advertencia de impacto de aves, dijeron las autoridades surcoreanas. Sin embargo, casi de inmediato, los pilotos declararon una alerta de socorro después de un impacto de aves e intentaron aterrizar en la pista 19.
Fue en este intento que el avión se deslizó por la pista sin tren de aterrizaje y estalló en llamas al chocar contra una barrera al final de la pista, según mostró un video verificado por NBC News.
No está claro por qué no se bajó el tren de aterrizaje, pero las autoridades también dijeron que el avión golpeó el localizador cuando intentaba aterrizar, un sistema de guía de aterrizaje al comienzo de cada pista, antes de estrellarse contra la barrera.
Un testigo dijo a un medio de comunicación local que escuchó el avión hacer ruidos y lo vio hacer un giro muy brusco durante su aproximación final.
