MODESTO, California - La madre de Edgardo Martínez finalmente pudo cruzar la frontera para poder despedir a su hijo, quien sufrió un derrame cerebral la semana pasada y se mantiene conectado a un respirador artificial.
Luego de un viaje a la frontera sin resultado y una serie de trámites, la señora Teresa consiguió lo que hace unos días parecía imposible. Este jueves consiguió un permiso humanitario que le permitió llegar a Modesto y así poder abrazar a su hijo por última vez.
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"Me entró una agonía y una desesperación que quería ver a mi hijo", dice Teresa, aún emocionada por el encuentro.
Edgardo ha estado postrado en una cama del hospital Doctors de Modesto desde el 4 de agosto, cuando tuvo que ser llevado a la sala de emergencias porque había dejado de respirar. Horas más tarde le dieron el diagnóstico: muerte cerebral.
Desde entonces, la familia buscaba una visa o un permiso humanitario que autorizara a la madre ingresar a Estados Unidos y así poder despedirlo antes que sea desconectado.
La familia ha decidido donar los órganos de Edgardo, por lo que su madre confiesa estar triste pero este acto aminora la angustia. "También estoy feliz por que mi hijo va a donar sus órganos a ocho personas y va a seguir viviendo. Él no está muerto, él va a vivir en ocho personas", dijo Teresa Gutiérrez.
El hermano de Edgardo, Orlando Martínez, comentó que el encuentro entre ambos "no hubiera sido posible si la gente no hubiera compartido, sin Telemundo que ahí estuvo, sin los consulados de Sacramento y San Diego, la senadora por Jalisco (...)".