Frontier Airlines anunció que dejará de aplicar cargos a los pasajeros que cambien de vuelo, siguiendo el ejemplo de sus competidores, en un momento en que la administración Biden establece normas más estrictas contra las denominadas "junk fees".
El cambio forma parte de una revisión anunciada el viernes del modelo de precios de la aerolínea de bajo costo, que atrae a los clientes con tarifas base bajas y llamativas y cobra tasas por todo lo demás, como la asignación anticipada de asientos y el equipaje de mano.
Manténte al tanto de las noticias locales y del estado del tiempo. Suscríbete a nuestros newsletters gratuitos aquí.
La aerolínea empezará a ofrecer paquetes que incluyen esos complementos, entre otros, como el embarque anticipado. Aunque algunas tarifas seguirán permitiendo a los viajeros añadir opciones a la carta, "esperamos que esa opción sea minoritaria entre los clientes", declaró a CNBC Barry Biffle, consejero delegado de Frontier.
El mes pasado, el Departamento de Transporte de EEUU promulgó una norma definitiva que obliga a las aerolíneas a informar por adelantado a los clientes sobre las tasas, incluidas las del equipaje facturado o de mano, un cambio que, según el Departamento de Transporte, ahorraría a los viajeros más de $500 millones al año.
Actualmente, Frontier cobra hasta $99 por cambiar de vuelo si el cambio se realiza dentro de la semana anterior al viaje, según el sitio web de la aerolínea. Delta, American y United suprimieron las tasas de cambio durante la pandemia de Covid-19 para los viajeros que reservaban en clase turista estándar o superior. Southwest Airlines no cobra a los clientes por cambiar sus pasajes.
"La verdad es que las cuatro grandes no cobran tasas de cambio en la mayoría de sus productos, así que nosotros no éramos tan deseables", dijo Biffle. Según Biffle, las tasas de cambio son una de las principales quejas de los viajeros.
Este artículo fue publicado originalmente en inglés por Leslie Josephs para nuestra cadena hermana CNBC.com. Para más de CNBC entra aquí.