MCALLEN, Texas - La tranquilidad de residentes y turistas que disfrutaban un día de playa este jueves 6 de octubre en la Isla del Padre Sur, en Texas, se vio interrumpida cuando apareció a orilla del mar un caimán de siete pies y medio.
Este comportamiento del animal, explica el herpetólogo Jacob Reinbolt, es inusual. Estos reptiles prefieren el agua dulce. Sin embargo, probablemente se encontraba cazando o se dejó llevar por la corriente agua dulce hasta que fue a para al mar, añade el experto en anfibios y reptiles, quien enfatiza que ellos tienen que permanecer en agua dulce.
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Avistar caimanes en la Isla del Padre no es nada extraño. Probablemente este animal es de los que se encuentran usualmente cerca de la planta de tratamiento de aguas, enfatizó Reinbolt.
"Cuando lo encontramos estaba exhausto. Ellos pueden permanecer un poco de tiempo en agua salada", dijo el experto, quien aclaró que en circunstancias como esta solo hay una oportunidad para atraparlos ya que si se adentran al mar puede resultar muy difícil capturarlos.
Para la población en general, afirma Reinbolt, el mensaje es que no se acerquen a estos reptiles ya que pueden ocasionar serios daños a una persona. Lo mejor es permanecer a una distancia prudente y nunca subestimar el poder que tienen.
Los caimanes en su hábitat usualmente no muestran ningún interés por los humanos y usualmente evaden a las personas ya que nos ven como depredadores y no como presa. Sin embargo, los ataques ocurren cuando las personas los alimentan y cuando están con sus crías.
En cuanto al visitante inesperado fue capturado y posteriormente liberado en la Laguna Atascosa, en el Condado Cameron.
